martes, 25 de septiembre de 2012

Simplemente escucha lo que tengo que decir

No tengo ni idea de como comenzar... no nos engañemos.
Puedo partir de esa base (aunque va a acabar siendo una premisa), "no nos engañemos". Y es que, acabo de terminar de devorarme (no literalmente) "Just listen" que, si me permitís comentarlo, ya lo dice todo.

Párate a escuchar, no hay más...

Así que, he venido a darme un repaso y a dejar de preocuparme sobre lo qué es potable y lo que no, porque a fin de cuentas, escribir siempre ha sido una manera (quizá la única que he tenido) de ser sincera conmigo misma.

Hace un par de días intenté escribir una entrada con el móvil, pero fue un desastre total de frases tristes e inconexas (la tristeza era de mi propia cosecha, la incoherencia un añadido del móvil). Pero hoy estoy positiva, porque he decidido dejar de engañarme y comenzar a ser sincera (como antes; cuando tenía diez u once años (antes de que comenzase a complicarse mi vida realmente (aunque me imagino que es lo de siempre y lo que dice todo el mundo... aún así, los problemas de uno siempre son total y absolutamente "transcendentales (entre comillas, claro) para uno mismo)) que no dudaba en decir lo que pensaba, cuando soltar un: "yo no miento" no era una mentira. Ahora (y me doy cuenta después de años) lo es... y me niego a ser parcialmente sincera. Porque es posible (o factible al menos) que mis quebraderos de cabeza, vengan, precisamente, de esa pelota en el tejado ajeno y ese ovillo que se ha ido haciendo más y más grande con el tiempo).
Aunque sé que no es fácil, porque al final, una se vuelve cínica (en su justa medida (no penséis que soy una neurótica que finge cada vez que le hablan... no es el caso, prometido)), al menos un tanto, y aprende a justificar cada movimiento, como en una partida de ajedrez (y sin saber jugar, como es mi caso) con esos peros que terminan siendo un: "no lo hago porque soy una jodida cobarde". 

Pero poco a poco (no pensemos en conquistar Roma en un día) voy a intentar volver a las raíces de la sinceridad infantil, porque, con "Just listen" he aprendido que las verdades duelen a veces... las mentiras (o verdades a medias, por muy piadosas que sean) duelen siempre. 

Mi primera tarea, supongo, es sincerarme conmigo misma, y responderme con sinceridad a todas las preguntas que aún hoy me sigo haciendo. Si no confío en mí, entonces, no puedo pretender confiar en los demás... Sería un poco absurdo (y yo peco de absurda constantemente).

Por otro lado, querría comentar que en mi vida "todo va bien". Pero bien es una palabra carente de matices, como pueden ser la palabra espléndido (que tiene un cariz mucho más positivo y bien aventurado) o la palabra insuficiente (que significa que algo falta. Que se necesita de un más (de una motivación, un plus o algo similar))
Por eso... definiría mi situación actual como confusa. 
Por una parte, adoro a mis amigos ( y aunque puedo contarlos con los dedos de una mano, soy plenamente consciente de  la fe ciega (aunque a veces no tanto... ¿Porqué no me atreví a contarle a... ella, lo que había ocurrido la noche del sábado y la conversación posterior?) (ahora iré a ello...) que deposito en ellos). Sé que puedo contarles lo que quiera, que ellos estarán ahí para ayudarme, siempre, sin juzgarme demasiado duramente.
Por otra parte, tengo la constante sensación de no haber terminado de saldar mis cuentas con el amor, aunque hoy no quiero centrarme en esto... siento que es mi pendiente constante (y aunque no me refiero a una cuesta, sino a un continuo, podría decir que, en cualquier caso, también es algo que me supone un esfuerzo casi físico (como el de subir una cuesta)) y... luego están los estudios, que, pese a las promesas que le hice a él, los tratos y las palabras (que se lleva el viento), se encuentran en un segundo o tercer plano que pronto comenzaré a teñir de alarmante (Ahora borraría lo de alarmante, porque sé que una buena amiga Colombiana me va a reñir en cuanto lo lea. A ti, Dulce, tranquila que te aseguro (y puedes creerme porque me he tomado enserio lo de ser sincera paulatinamente) que no tendré problemas a pesar de mi falta de atención).

Así que continuando con mi nueva neura, puedo decir que siento que mi vida va a tomar un cariz muy positivo y que, pese a todo, me siento entusiasta y positiva (que dista mucho de mi carácter a lo largo de estos últimos meses)

Bueno... para finalizar (me doy cuenta de lo diferente que es esta entrada a todas las anteriores... parece tan infantil... y sin embargo, creo que es la más personal (entendedme, no en el sentido estricto de la palabra, sino más bien en el sentido de ser la más sincera, sin peros o verdades a medias... sin frases que-no-puedo-decir-porque-estoy-demasiado-asustada-para-hacerlo)), como lo prometido es deuda ( y también porque debo sincerarme conmigo misma)... me pregunto porqué no pude confesarle a mi mejor amiga la conversación que mantuve con él, el domingo de madrugada.
Para empezar, creo que en parte mi negativa (y mi posterior propuesta de que se lo preguntase ella misma a él) se debe a que estaba casi completamente convencida de que él no diría nada. Fue una conversación de estas en las que es más importante lo que está escrito entre líneas que la conversación en sí, y, realmente, me impactó muchísimo que me expusiese todo aquello que yo misma me había convencido de que tarde o temprano ocurriría. Pero supongo, que por mucho que la esperes, la realidad no deja de ser real (y por tanto, palpable) y que quizá por eso, a pesar de todo es capaz de sorprenderte. Para mí fue como un balde de agua fría... Inconscientemente, él, me estaba escribiendo todo aquello que yo misma había escrito antes (en otro papel y en otro contesto) y me estaba pidiendo, esta vez sí, una reacción... la que fuera. 

Y no sé, supongo que en realidad no quería compartir esto con mi mejor amiga.

Y es que no siempre se está preparado para compartirlo todo, y yo, a lo largo de los seis - siete últimos meses, me he acostumbrado a callarme demasiadas cosas... y las suposiciones son siempre muy atrevidas...

La emperatriz de los sueños (que está realmente contenta de haber vuelto, con una entrada tan... juzgarla vosotros mismos y me decís :P)

6 comentarios:

  1. ¿?¿?¿?¿? ¡¡¡Estoy como confundida!!!
    Pero igual me alegra tenerte de vuelta Princesa, te leo aunque no te entienda
    y te sigo aunque me pierda...
    pero prefiero seguir perdiendo el entendimiento que dejar de leerte!!
    Un abrazo incondicional desde el otro lado del océano Atlántico.

    ResponderEliminar
  2. jajaja de verdad no se me entiende? por que? :) bueno... es una entrada distinta a las anteriores y mientras yo entienda mis razones supongo que es suficiente..." las suposiciones son siempre muy atrevidas..." un besazo :)

    ResponderEliminar
  3. Tienes razón lo importante es que tu te estes entendiendo y que escribirlo te aclare tu mente!! Feliz noche Princesa

    ResponderEliminar
  4. ajaja estuve hablando con un amigo ayer y él tqmpoco me entendió bien (falta contexto) pero bueno... si es que os tengo mal acostumbrados tanto "que si sí que si no" jajajaja
    No voy a engañarte, me defrauda un poco escribir algo tan confuso, porque siento que no soy capaz de hacer comprender lo que quiero... pero bueno, es un "he vuelto" inesperado (no creo que quepa duda) y... es lo que hay dulce... ni más ni menos ;) un beso muy grandeeeee :*

    ResponderEliminar
  5. Hola de nuevo emperatriz de los sueños!

    Hacía tiempo que no comentaba, no por falta de interés o descuido, sino debido a algún que otro momento difícil que he pasado estos días, en los cuales no me siento suficientemente capaz.

    Ya veo que "Just Listen" va a ser otro de tus libros dignos de ser leídos, y ¿qué mejor libro que uno en el cual puedas sentirte plenamente identificado? La verdad es que siempre ayudan a coger perspectiva sobre las personas y la vida en sí.

    Creo que es muy doloroso y por lo tanto difícil, pararse a escuchar y ser sincero con uno mismo, pero tal y como dices, es aún más doloroso andar perdido engañándose a uno mismo. Desgraciadamente no es algo que se logre del día a la mañana y te lo digo yo, que también hablo por mí.

    Si... Yo también odio cuando me sucede, decirte a ti mismo que es verdad, creer en ello incondicionalmente, para luego empezar a justificarlo todo, moviendo piezas para que todo encaje, hasta que llega un punto en el que todo se desmorona, no puedes más y fácilmente caes en el cinismo. Y todo eso, ¿por qué? Por no haber sabido escuchar des de un principio, por no haber escuchado esa otra voz en nuestro interior.

    Siempre me ha gustado la manera característica que tienes de dialogar contigo misma (algo que quizá ya dije antes), cosas cómo "Así que continuando con mi nueva neura, puedo decir que siento que mi vida va a tomar un cariz muy positivo" una neura para nada desechable y que a todos nos convendría tener más a menudo ya que la felicidad proviene, en gran parte, desde nuestro interior. Me alegra muchísimo tenerte de vuelta, y es que ya puedo sentir parte de ese entusiasmo y positividad.

    Y hablando de tu "balde de agua fría", me atrevo a decir que muchas veces las cosas que suceden después de haberlas predicho nos sorprenden más que las inesperadas propiamente dichas.

    Así que para nada creo que esa entrada sea infantil, en absoluto. Quizás compleja, pero seguro que más simple que ese mar de confusión que llevabas dentro, y que a todos nos convendría desenmarañar de vez en cuando. Sabes que siempre ha sido y será un grato placer leerte, ya que tus entradas nos retan cada vez más a conocer, profundizar y descubrir nuevas cosas sobre nuestra persona.

    En fin, eso es todo, ya que no me gustaría seguir pecando de pretencioso (algo que en mi, al parecer, es inevitable), aunque en realidad también esté hablando conmigo mismo.

    Con mucho amor

    iMad

    ResponderEliminar
  6. iMad :) No me cansaré de decirte que te falta "amor propio" cuando hablas de tu manera de expresarte, y esa imposibilidad (qué sólo ves tú) de hacerlo "correctamente".
    Eres analítico y capaz de simplificar cualquier cosa para, así, analizarla. Para ti A es A y B es B y tirando de esa base, desenredas lo que anteriormente era una pelota muy grande. Así que no te taches de pretencioso porque no lo eres, o en cualquier caso, no más que los demás (todos somos un poco pretenciosos a veces, ¿no crees?)

    Y respecto a comentar mis entradas, no te preocupes Darling, no hay ningún problema en que no comentes... aunque vete preparando tus argumentos, porque, pienso pillarte "por banda" un día de estos y preguntarte, que te ha impedido comentar ;)

    Lo cierto es que mis neuras, son eso, neuras. Que me dan auténticas venadas, así como cada diez días pero que igual que vienen se marchan (soy bastante temperamental, ya lo sabes). Y desgraciadamente o afortunadamente (a interpretación de cada uno) ésta es una neura que se va a acabar más bien pronto. Aunque, sí que he decidido dejar de engañarme a mí misma (y no pienso negarme eso) no puedo pretender que mi ética sea la misma de hace 6 años, porque, entonces sí que podría tacharme de cínica... y con tanto prejuicio es imposible rallar la sinceridad infantil de la que presumo en la entrada.

    Te recomiendo "Just listen" para pasar el rato... Es una novela juvenil y fácil de leer, aunque tiene un argumento no demasiado sólido por lo que le falta tirón, pero... en cualquier caso, a mí me gusto. Disfruté mucho con Owen (que me ha enseñado que quizá necesite un poquito de "cultura musical" y es quien ha inspirado esta neura que ha inspirado, a su vez, esta neurótica entrada jajajaj). Así que si tienes un rato libre... ¿por qué no habrías de leerla?

    Un beso enorme iMad... cuidate mucho y hablaremos prontoooo un besooo :)

    ResponderEliminar