Estudios o.O jajjaja

Aún intento descubrir el sabor de lo pequeño en toda su magnificencia.

Me doy cuenta de que (tal vez sea la edad) cosas que antes carecían de sentido para mí, cosas que me eran repulsivas, insignificantes, aburridas, monótonas... son ahora un nuevo mundo (literalmente dicho).

¡Me gustan las clases!. Escribir esta frase es para mí algo alucinante, de veras, es como decir: "madre mía, ¿donde me he metido?", es no saber que decir y decirlo todo. Es como un buen consejo dado a tiempo, no lo sé, es... como la música. Ya forma parte de mí.

Me quedo ensimismada sobre todo con las clases de historia (hacía años que no disfrutaba de veras con esta asignatura), con sus leyendas e historias (¿de dónde saldrá el nombre de la asignatura? jajaja) que son reales, tan lejanas y cercanas... me hace recordar mis propios sueños, siempre rozando la realidad, en ése punto culmine del asunto.

Con las clases de artes. Son para mí las clases en las que más puedo soñar; soñar y hacer realidad los sueños, es mágico. Lo cierto es que no soy especialmente buena con las manos, pero mi cabeza, ¡oh, dios mío! trabaja constantemente, vuela de un mundo a otro intentando plasmar una y otra vez mis mil y una idea (siempre inconexas) sobre un papel, un trozo de cartón, cristal o incluso en trocito de plástico. Lo que sea. Crear, crear, crear...

Con las clases de Física y química, en las que me supero cada día más (por pura devoción). Será que me siento lidiada con Bohnr, las teorías atómicas, las formulas, los números sin sentido con un significado oculto (como mi propia cabecita).

Las clases de Lengua castellana (¿tengo qué dar explicaciones al respecto?)

Nunca pensé que escribiría esto, ni imaginármelo, vaya... cualquiera que me conozca pensará que me he electrocutado y quedado en shock. ¡Qué va!

Hoy más que nunca sé que será de mi mañana :)

La emperatriz de los sueños